domingo, 5 de mayo de 2013

NUEVA HISTORIA... acercándonos a un final inesperado...

Querid@s:

Esta semana, actualizo nuestro blog más temprano que las últimas fechas.
Este trozo de historia es la continuación de la primera entrega realizada la semana pasada...
Un relato que tendrá un desenlace opuesto a lo que mis relatos más extensos l@s tienen acostumbrad@s.

Cada semana, explorando un poco más en los aspectos íntimos, y profundos de los personajes... espero que les guste esta continuación.

RECUERDEN!! Que nuestra exposición "Eco de Dos Almas" junto a Macarena Marín está DISPONIBLE para viajar a todo Chile. Sólo deben contactarnos por acá.



Comenten, participen, hagan parte suya esta creación...



Abrazos, Bendiciones y muchas gracias por todo.



Pinhead










Continúa...


-Ven con nosotras- me gritabas desde lejos.
Yo con una sonrisa amable y nerviosa, me excusaba.
-No estoy para esos juegos- gritaba de vuelta. Me estaba enamorando. De sólo mirarte, de sólo contemplarte y ver cómo sonreías, como amabas la vida y como me mirabas de reojo. Porque lo sabía, siempre me mirabas.
Aunque por dentro mi ser gritaba despavorido que corriera a tus brazos y te besara y me hundiera en tu cabello azabache, debía controlarme. Era parte del juego que siempre nos habían enseñado.
Sabía que tu mirada me decía todo. Sabía que sentías lo mismo. Sabía que me amabas, que yo te amaba.
Esa mirada fue la que me capturó.
La misma que hoy no sentía. Pero sabía que en tu sueño, estabas feliz, porque estábamos juntos al fin. Y seguía arañando cada trozo de tu cuerpo, disfrutando con pasión este mágico instante.
Tan inesperado como esa vez que, de visita en tu casa, pude observar levemente bajo tu falda y confirmar que tú buscabas seducirme, pues yo me sonrojé y tú sólo sonreíste.
Sabía que sentías lo mismo que yo.
Y era feliz mirándote a lo lejos, mientras jugabas con tus amigas y saltabas, corrías.
Yo era feliz contemplándote, en silencio.
Como ahora.
Cuando este silencio tuyo me hacía sentir más pasión. Y ver cómo se deslizaba una leve sonrisa me hacía feliz.
-Te amo desde siempre- susurraba en tu oído, mientras seguía haciéndote el amor
Y podía sentir esa conexión especial que sólo dos enamorados sienten. Porque yo sabía que estabas enamorada de mi, aunque no lo quisieras decir ahora, aunque no me miraras con esa pasión que vi por tanto tiempo.
Esa pasión que vi aquella tarde hace muchos años, cuando visitaste este mismo río junto a tus amigas, y desnudas, reían y disfrutaban el frescor del agua.
Mientras yo, oculto entre los árboles, podía mirar tu cuerpo.
Tu piel oscura que hacía que el agua cayera con una gracia única. Ese cuerpo celestial que tenías, con tus senos formados, tus nalgas tersas, tu cabello espeso que podía incluso secar el sudor que corría en mi rostro oculto al otro lado del río.
Admiraba desde lejos tu belleza natural. Mientras tú reías y hablabas de otros chicos seguro. Yo sólo me fijaba en tus ojos. Con ese café oscuro que penetraban mi alma completa.
Y ellos sabían que yo estaba ahí, porque mirabas hacia donde estaba yo, pero no decías nada. Yo estaba seguro que me veías. Y eso te hacía feliz, porque sabías que nuestro amor era real y mutuo.
Era esa pasión la que hoy no siento.
Pero sé que es tu silencio el que nos bendice. Puedes estar asustada, pero es mayor el amor que sentimos. Por eso sigo haciéndote el amor como nunca nadie antes. Tu primera vez debe ser un premio, un regalo. Como lo que yo hago contigo.


Continuará...








César B. Fuenzalida (C)
Todos los derechos reservados queda prohibida su reproducción total o parcial de este escrito,por cualquier medio.

4 comentarios:

UN AMOR SI SE PUEDE RECUPERAR dijo...

Hermoso Cesar te pasaste...un besote

UN AMOR SI SE PUEDE RECUPERAR dijo...

Hermoso Cesar te pasaste...un besote

CUENTA CERRADA dijo...

Awwww Mi Pinhead... que romántico
<3 hermoso escrito -.... Lindo te quieroooo Bendiciones Maca!!! Cariños César

Anónimo dijo...

Esta historia me encanta!!! como esta escrita, como se desarrolla, todo! espero continúe pronto. Que estés muy bien, saludos.

BG